Antes de comprarse un equipo de buceo, primero pruebe. No tiene que ser un gran nadador para gozar del salto de la escafandra autónoma. De hecho, algunas personas nadan mejor porque no necesitan sacar la cabeza del agua para respirar. Basta con sentirse cómodo en el agua, ser capaz de nadar unos 200 metros, pedalear durante 10 minutos y estar en forma para bucear.
Esta última característica significa que el corazón, los pulmones y la presión arterial son normales y que no se tiene asma, diabetes, epilepsia o cualquier otra enfermedad que pueda impedir entrar en el agua.
Cada escuela tiene su propia política, pero todas te preguntarán sobre tu estado de salud antes de aceptarte para el entrenamiento y pueden pedirte un certificado médico. En caso de duda, consulte a un médico especializado en temas de buceo: las mujeres embarazadas no deben bucear. Antes de partir hacia un destino de buceo en un país extranjero, asegúrese de que el buceo sea adecuado para usted.
Todas las escuelas de buceo ofrecen un curso de iniciación en la piscina en el que el instructor ayudará al alumno a familiarizarse con el equipo y algunas de las técnicas antes de probar el agua bajo supervisión.
Por lo general, el curso de iniciación es suficiente para familiarizarse con este deporte. Compra sólo una parte del equipo y alquila el resto en la escuela hasta que estés seguro de querer continuar. Poco a poco irás adquiriendo la experiencia y las habilidades necesarias para enfrentarse a situaciones diferentes e incluso muy difíciles.
Al igual que la suma de nuestras experiencias personales construye nuestro carácter, también la capacidad de bucear mejora con el número total de inmersiones, tanto las buenas como las que se equivocan. Como en cualquier deporte de aventura, hay un elemento de riesgo, pero con una buena formación detrás, el riesgo se reduce.
Escuelas de buceo
Hay muchas escuelas de buceo en el mundo y la mayoría tienen buena reputación. Pero, ¿hay alguna mejor que otra? Todas las escuelas tienen requisitos mínimos similares para obtener un certificado de nivel 1, con un curso que incluye teoría de buceo y algunos ejercicios prácticos.
Algunas escuelas exigen un número mínimo de horas de teoría, otras requieren un número mínimo de horas de formación práctica, ya sea en piscina, aguas confinadas o abiertas. Otras escuelas esperan que los alumnos cumplan los requisitos mínimos, pero dejan que el profesor decida el número de horas de teoría y práctica.
Los entrenadores personales pueden elevar los requisitos mínimos de las escuelas y, de hecho, muchos lo hacen. Para una buena enseñanza, la escuela no es tan importante como el instructor. Un buen instructor no sólo debe tener experiencia en buceo, sino también capacidad de comunicación, cualidades de liderazgo y empatía con los alumnos.
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