deportes · 4 abril, 2021

Principios y bases de la moderna técnica de esquí

¿Por qué gira un esquí? A pesar de la primera impresión de ingobernabilidad del esquí, este instrumento se mostrará, por el contrario, perfectamente funcional para la obtención de nuestra curva. 

Las características del instrumento esquí 

La parte inferior del esquí Pozuela está perfilada por unas láminas de acero cuya finalidad es cortar la nieve impidiendo que el esquí se deslice lateralmente. Sin embargo esta precaución no evita en absoluto la posibilidad de deslizamiento en sentido longitudinal. 

Otra característica importante para nosotros es la línea de cotas. 

Si observamos con atención el skin, notaremos de inmediato que es más ancho en la espátula y en la cola que en el centro. Gracias a esta característica, poniendo el esquí de canto, sobre una superficie plana, veremos que su parte central se separa de esta. Si queremos que todo les quiera adhiera de canto debemos producir una presión sobre él arqueando. 

El esquí así arqueado dibujara en la pendiente un arco de circunferencia nuestro arbuco de curva. 

En efecto, si esta presión se ejerce sobre la pendiente Nevada y durante su deslizamiento, el skype proseguirá su carrera no ya de forma rectilínea, sino a lo largo de la trayectoria dibujada por ese arco de curva. Hemos establecido así que por medio de los tantos el esquí se opone al deslizamiento lateral, manteniendo en cambio la tendencia a deslizarse a lo largo de la trayectoria dada el radio de curva que el propio esquia delimitado en el terreno. 

La primera deducción que podemos obtener es, qué es la presión sobre el esquí y no el aligeramiento lo que produce la fricción y el contacto indispensable para que se originen la fuerza centrípeta necesaria para conducir y obligar al esquí a permanecer dentro del arco de curva. 

Técnicamente deducimos de inmediato que un retroceso de peso, desde el centro de los esquís a sus colas, provoca una pérdida de contacto de las espátulas con la superficie nevada: Falta la fricción de la nieve, los skins no se arquean y no recorren la trayectoria de curva. Un adelantamiento excesivo del peso sobre las puntas de los esquís llevará, por el contrario, a una menor fricción de las colas sobre el terreno, y a su consiguiente deslizamiento hacia el exterior de la curva por efecto de la fuerza centrífuga. 

Así el skype puede aprovechar al máximo el arco lateral del esquí solo si mantenemos siempre, al esquiar, una posición centrada gracias a la cual nuestro peso recaiga sobre el centro de los esquís. 

Habiendo descubierto que por qué gira el esquí, analicemos ahora los mecanismos y los ajustes que hay que adoptar durante la misma curva. 

En la primera parte de la curva cuando comenzamos a dejar la trayectoria de diagonal, todo el sistema esquiador esquí experimentará una inmediata y fuerte aceleración, debido precisamente al aumento de la velocidad de deslizamiento. Esta aceleración tendrá por inercia hacernos cargar el peso hacia las colas de los esquís. Así pues, deberemos prever la y anticipar la con un desplazamiento hacia delante para contrarrestar sus efectos. Entre otras cosas, esta anticipación del cuerpo es necesaria también para recuperar el equilibrio general en una situación de pronunciación pendiente. En cambio en la segunda parte de la curva deberemos lograr oponerse eficazmente a la mayor fuerza centrífuga que nos impulsa hacia el exterior de la curva haciéndonos salir de la tangente. Ellos solo pueden hacerse con el movimiento de angulación y traslación de la cadera hacia el interior de la curva y con un fuerte aumento de la presión sobre el centro del esquí. 

Obtendremos así la doble ventaja de no volcarnos hacia el exterior de la curva y de cantear de forma continua y precisa. 

La mayor o menor carga de peso sobre el esquí se lleva a cabo con los movimientos de extensión y flexión, puesto que cualquier fase de carga no puede realizarse sin la fase precedente de descarga y viceversa. La máxima descarga se producirá en la primera parte de la curva o fase de iniciación, la máxima carga en la segunda parte o fase de conducción. Resumiendo los tiempos de este movimiento son: 

Flexión para permitir las sucesivas tensiones. 

Alejamiento del baricentro de la superficie del esquí, simultáneamente se aprovecha el aligeramiento provocado por este movimiento para efectuar cambio de cantos. 

Proyección hacia delante del baricentro para contrarrestar la Federación. 

Actitud de angulación para contrarrestar la fuerza centrífuga. 

Descenso del baricentro con aumento de presión y carga sobre los esquís, procurando no poner en peligro la centralidad. 

Continuación del movimiento hasta la trayectoria de la diagonal sucesiva sin interrumpir la presión.